El ataque a balazos a la sede sindical de los trabajadores aceiteros en Rosario, es una muestra de la avanzada reaccionaría y de carácter fascista que, en el marco del sometimiento al FMI para cumplir a rajatabla el pago de la deuda externa y la voracidad sin límites de los capitalistas, intenta imponer sin miramientos el aniquilamiento de los salarios y los derechos de los trabajadores.
Por lo tanto, no vemos en este ataque una casualidad, sino más bien una decisión deliberada por amedrentar a los trabajadores que luchan y se organizan para la defensa de sus intereses.
Este hecho es muy grave y por lo tanto enciende las alertas para preparamos a enfrentar a los grupos que amparados en la impunidad que les otorga el Estado terrorista actúan con su consentimiento.
Es de vital importancia rodear de solidaridad activa a los compañeros aceiteros de Rosario y ganar las calles para repudiar este ataque a los trabajadores.
Rosario. agosto 2022